Con eso de que ayer hizo un año que estoy soltera, con eso de que había que hacer balance, con eso de que no sé en que situación estoy, con eso de que ya es primavera, con eso de que no sé-no sé, con la excusa de que no tengo excusa y de que a veces me obsesiono y de que soy lo peor y una débil mental… me dispuse a hacerlo todo mal y a procurarme una noche patética:
1. Antes de levantarme y a oscuras me releí todos los sms del último año que aún no he borrado del móvil: besos caducados, promesas incumplidas y buenas intenciones pasadas de fecha… pa llorar, o pa mear y no echar gota. Tentador, pero no mandé ningún sms, cerré los ojos y me volví a dormir.
2. Por la noche y cuando Luis se despistó, envié un sms a uno que no se lo merecía… que si estás en Túnez… La mano siempre en contacto con el bolso. Vibró el móvil una hora después y no era él, claro.
3. No sólo me puse el vestido de la suerte sino también las bragas de la suerte, las de Bridget Jones…
4. Creo que fui a más bares que en toda mi vida: Aduana, Mentidero, Portón, la General, Mate, Baobar y hasta al DNC!
Seis de la mañana, con dolor de pies y la mala leche correspondiente me dispongo a salir del Dance… De repente me vibra el móvil. Número desconocido. Ana Belén: “cógelo, cógelo!” Es el de Cáceres que me espera en la puerta. Pa haberlo hecho todo mal…;o)
7:20 a.m Recibo un sms: “Saludos desde un oasis tunecino”. Ya… me da igual!
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