domingo, 16 de septiembre de 2012

Comienza ROM



Me pareció una idea genial, hasta atrevida, cuando J nos invitó a unos amigos y a mí a participar en una tertulia radiofónica sobre la mujer moderna. Yo, que mi única experiencia en la radio se remontaba a 1987 por algo que organizó mi cole, me disponía a enfrentarme a aquella alcachofa de gomaespuma, que al principio parece que muerde, y a mi timidez, que la tengo aunque no lo parezca. Y ocurrió lo que dicen, que te pones a hablar por el micrófono, sobre todo si es acompañada de la gente adecuada, y todo fluye. Y realmente lo pasas pipa. Y lo que dicen todos mis amigos periodistas: que la radio tiene algo que engancha. Y sí, acabé aquella tarde con ganas de más. 

Pasarían unos ocho meses quizá cuando, con la cabeza en otras cosas, me sorprendí al ver a mi amigo J, el hombre de radio, asomando por una ventana de un edificio de mi barrio. “Sube ahora mismo”. J se mudaba a una nueva oficina, pensé, porque él no soltaba prenda, sólo me enseñaba el piso con una ilusión que no le cabía en el cuerpo. “Hay un proyecto, Bitter, y queremos contar contigo”. Y sin saber qué era le dije que sí, que esa emoción que tenía era muy contagiosa.

Fue pasando el tiempo y, cual vecina cominera, cuando tenía un ratico, me iba a ver a J y a A, a ser testigo de los avances de su proyecto. Poco a poco se fue desenmascarando el misterio. Una mesa ovalada, unas paredes insonorizadas, unos micrófonos, unos cascos, una caja de mezclas, un montón de cables y por fin un logo daban forma a aquello que J me fue gradualmente contando. Radio Online Murcia se fraguaba gracias al empuje y visión de cuatro amigos que creyeron que algo muy grande podía empezar de una idea tan sencilla.

Llega una nueva radio, la radio 3.0, hecha en Murcia pero emitida al mundo por internet. Estés donde estés, sea en casa, en el curro, en Cuenca o en Japón (que lo he probado), podrás escucharla y formar parte de este proyecto. Una radio diferente cuyo objetivo será divertirte, acompañarte, alegrarte el día y, estoy segurísima de ello, engancharte como a mí.

Este verano empezaron las pruebas, las quedadas, las risas y hasta los aplausillos de emoción. Como cuando en una de esas tardes tontunas y calurosas de julio en las que me pasé por allí, coincidí con Yayo Delgado. Junto a Alejandro Campillo, cantante de nuestros Fenómenos Extraños, grababa un piloto de su programa. Desde el otro lado del cristal, con mis cascos puestos, disfruté como una enana de eso que llaman hacer radio. Caretas, cuñas, ráfagas y entradillas daban forma a un programa que revolucionará la tarde de los lunes. De entre sus geniales o incluso disparatadas secciones, contará con una entrevista a un personaje de la vida murciana, y adivinad quien fue la persona elegida para la prueba de aquella tarde. ¡Yo que simplemente pasaba por allí! Entonces volvió a ocurrir, sin miedos ni alcachofas caníbales, sino con mucho buen rollo, surgió la magia de la radio y a mí no había quien me despegara de la silla.

Hace poco leí que el proceso comunicativo que se establece entre el locutor y el oyente es una conversación entre dos personas que, sin conocerse, mantienen una relación próxima y amigable. Digo yo que será eso lo que engancha, el sentir que tienes amigos al otro lado del micrófono. El pasado viernes los chicos de Radio Online Murcia se presentaron por fin al mundo con un programa especial que hizo que fueran trending topic nacional por unas horas. Yo no pude estar presente, pero notaba, desde el otro lado de mi ordenador, tal emoción e ilusión de sus creadores y participantes, que hasta veía el brillo de sus ojos navegar por el ciberespacio hasta Lorca, donde yo estaba. Entonces, como buena vecina, no pude evitar llamarlos para saludar y desearles toda la suerte del mundo.

Comienza Radio Online Murcia. Cámbiate. Engánchate.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Tertulia sobre la mujer moderna? Debes ser la única que conocen.

anita dijo...

¡Ay, mi Conch, si es que además de "festivalera" eres tan polifacética! Mucha suerte, mierda, o lo que sea...y arriba la radio...

Conch dijo...

Hey! Anita! Ahora te descubro... ¡a la vejez!

Arriba la radio :)