Ser o no ser Peter Pan, that is the question.

Peter Pan se negaba a crecer, eso lo sabemos todos. Por eso no lo aguanto, y cual Capitán Garfio digo: “Odio, odio a Peter Pan”.

Peter Pan aparece sin querer en la vida de todos. Muchos de nosotros, pongamos llegados los 26-27 años o, pa que nos vamos a engañar, tras una ruptura amorosa, hemos intentado decidir nuestro camino en la vida de una manera radical: O ser el juerguista y desmelenado Peter Pan o ser adulto, responsable y padre/madre de familia, a poder ser. Se nos va la olla. Y que levante la mano quien no haya pensado alguna vez girar pa un lado o pa otro. Yo, casi cada fin de semana durante unos 4 años.

Peter Pan se negaba a crecer, pero es que además no crecía. Se quedaba en el cuerpecico ese extraño entre los 12 y los 17. (Madre mía, Dios me salve a mí de quedarme atrapada en esa edad, qué horror) Se nos olvida que es un personaje de cuento! Crecer es inevitable, jolín! Que tú te creas Peter Pan y te niegues a crecer es otra cosa (esquizofrenia?). Ahora: analiza lo que significa para ti el no crecer o en otras palabras, no EVOLUCIONAR, porque a mí, sinceramente, si lo pienso mucho, me parece ridículo y vergonzoso.

La vida tiene sus fases, que dice la canción. En qué fase te encuentras tú? Yo creo que a mis 30 años estoy en la fase de los 30 años. Ni en la de los 17 ni en la de los 50. Ni de cuchicheos inocentones con las amigas, sentadicas en la esquina de un bar, ruborizándome cada vez que entra un “tío bueno” y me dice “tienes fuego?” (me ha hablao, tía!), ni acostándome a las 22:15 un sábado noche, aburrida, harta y con un culo tamaño mesa camilla porque “total!”. Conozco gente de los dos extremos y todos ellos tienen 30 años y es una pena que dejen pasar la vida de esa manera. Sin vivirla.

Peter Pan se negaba a crecer, pero yo no soy Peter Pan. Que me lo pase bien y crezca con el espíritu de un niño es otra cosa.

La canción de los ECDL tiene su aquel y su parte de razón pero por otra ¿entiendo que cuando te llega el amor hay que dejarse la fiesta? Pos vaya un rollo. Así le fue a Dani Martín, que le dejó la novia y ahora se dedica a organizar conciertos nudistas.