- mi carpintero, Ramón, por ser el más rápido a este lado del Segura y por las cosas tan bonitas que está haciendo, siempre con una sonrisa. (En la foto, interior de mi vestidor, visto desde mi dormitorio.)
- mi tío Ramón, que era el más grande y el mejor tío. Porque me acuerdo mucho de él y porque él fue el que eligió el color que me ha hecho ser como soy.
- Paul Spleen, por inspirarme este post y porque es, casi casi, lo que yo quise ser. Ahora, como venga a Murcia y no me dé un toque, lo mato.
Para ellos y para vosotros, un poquito de Rock & Roll para que empecéis con alegría la semana.
Si véis que tarda mucho, lo tenéis también aquí.
4 comentarios:
Qué pasada, pedazo castillo, pedazo vestidor.
Hermosa, gracias por tu comentario, y, ya sabes que mi blog es el tuyo. Felicidades por encontrar tu "espacio", tu "casa", es una maravilla y , por lo que he visto, dice mucho de ti.
Abrazos¡¡¡¡
DESDE LUEGO, LOS QUE HEMOS VISTO EL ANTES Y EL DESPUÉS....VAMOS A FLIPAR MÁS QUE LA FAMILIA DE UN CONCURSANTE DE 'EXTREME MAKE-OVER' (CAMBIO RADICAL...)...enhorabuena!!!
Es para fliparlo, sushito, yo lo flipo cada vez que voy. Este mediodía ha sido emocionante encontrarme con mi Ramón, pero ya esta noche, cuando he visto to lo que ha hecho el tío... lagrimones, nene, lagrimones. Hasta me ha montao un mueble de Ikea.
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