jueves, 9 de julio de 2009

Fin del plan abstemio?

Hoy, 9 de julio, acaba mi plan abstemio. Un plan de un mes que empecé sin motivo alguno al volver de Italia. Un mes, me dije, así, porque sí. Porque creo que voy a poder y a ver qué pasa, a ver qué beneficios me aporta. Pues he podido, he aquí los beneficios:

1. Me he pesado y no hay ningún cambio. ¿Será por el batido de chocolate, el helado en casa de la abuela, el helado en delado, la merienda en Ikea, las chiquilín nocturnas, los entierros* del chiringuito...? Nah, no creo.

2. Mi monedero sigue igual de vacío y mi cuenta corriente está, a 9 de julio, al mismo nivel patético que todos los día 9 de todos los últimos meses.

3. Me he levantado con dolor de cabeza, y esta vez sé seguro que no es resaca. Me he tomado una pastilla... y un par de chiquilines, no vaya a ser que me haga daño al estómago ;)

Sea como sea, me beneficie o no, que seguro que sí, lo alargo hasta el próximo 3 de agosto, día en que lo romperé con una Estrella de Galicia o un Alvariño.

*Un entierro es un plato con patatas fritas de La Torre, boquerones y aceitunas.

2 comentarios:

Antonio Rentero dijo...

Un pequeño truco... el dolor de cabeza de por la mañana en realidad SÍ es resaca, aunque no hayas bebido alcohol.

Yo no bebo alcohol (bueno, media copa de vino ocasionalmente con la comida), y alguna mañana post-fiesta me he levantado semiresacoso... la explicación es que tienes leves síntomas de deshidratación. Saca las cuentas:

tomaste coca-cola con la comida

un zumo a media tarde

una fanta con la cena

un nestea en el primer bar

un batido en el segundo

un san francisco sin alcohol en el tercero

otra fanta en el cuarto

te acostaste a las tantas

te levantas a las tantísimas

llevas casi 20 horas sin beber agua, te estás deshidratando... eso es lo que te pasa.

El día que me di cuenta de esto perdí la verguenza a pedir botellines de agua en los bares cuando salgo de marcha, aunque piensen que voy empastillao.

Conch dijo...

Tomo nota! Tienes razón seguro.

A mí no me da vergüenza pedirme botellines, suelo hacerlo cuando estoy de copas. Además de porque soy muy propensa a las resacas, porque hay un momento en que la fanta te deja la boca más áspera...

Lo que me putea es la gente que te interroga cuando te ve con el botellín, qué pesaos, dejadme en paz!