Beauty Days

Foto by @Luvaloz

La idea realmente se la cogí prestada a mi amiga I, que dice utilizar los domingos para dedicárselos a sí misma y a su belleza. Beauty Sundays los llama, domingos de belleza, que usa para acicalarse, encremarse, enmascarillarse y sobre todo, mimarse mucho, que al final estas cosas acaban embelleciendo también el interior de una misma. La idea como tal me parecía brillante, pero en mi caso la realidad es otra, y los domingos, que en mi mente son de color negro, a mí se me llenan con todo tipo de actividades sociales, de currele y de preparación para la semana, que me impiden apartar algo de tiempo para mí misma. Además, ponerme guapa para regalárselo a los lunes sí que me parece una pérdida de tiempo y de todo. Guapa hay que ponerse para los fines de semana. Así, he asignado mi sobredosis de amor propio a la tarde de los viernes. Beauty Fridays desde ahora, que hasta lo apunto en mi agenda y así, no hago más planes esa tarde, no vaya a ser que se me olvide, que capaz soy.

Y es que ha de ser los viernes, que, aunque me chiflan, lo hablaba el otro día con mi amiga M, tienen un puntico triste cuando estás soltera. Un puntico. Como bien lo reconocía otra amiga hace mil años cuando el novio la dejó: “Y ahora ¿qué voy a hacer yo los viernes?”. Cómo será la cosa de tremenda, que mis amigas y yo nos acordamos de aquello todavía. Tanto tiempo debe hacer de eso que creo que en aquella época ni siquiera surfeábamos por internet, porque si no, habría acabado esta amiga, erróneamente, encontrando consuelo del malo en webs como la que yo encontré el otro día.

“Boyfriend Replacement”, algo así como “Sustituto de novio”, se llama el sitio web en cuestión. No puede ser la cosa más triste. Una página donde ahogar tus penas a base de consejos de psicología barata y frases de aliento absurdas, que sólo consiguen alimentar tu sed de venganza contra el género masculino, y a la larga, sentirte peor de lo que estabas antes. Incluye también esta web historias de rupturas trágicas y cómo no, no podía faltar la tienda online para captar la atención y los cuartos de las deprimidas. La tienda de los horrores: chocolate, chocolate y más chocolate, que para eso lo llaman el sustituto del… novio. Conclusión: al final no sólo te calienta la cabeza con pensamientos negativos, haciendo de ti peor persona, sino que también te anima a engordar para colmo de todos tus males.  De ahí que yo proponga con más motivo los Beauty Fridays como el mejor sustituto del novio y como, en definitiva, obligación de toda mujer.

En mi primera tarde de beauty y amor propio dormí la siesta, me fui a la pelu y tras ello, de rebajas con la melena al viento. Y es que ¿qué tendrá un corte de pelo que te hace creer que con él empieza una nueva vida? ¿Y lo que mola probarse ropa y hacer posturas ante el espejo? Y la cabeza en ebullición, que se me llenó de pensamientos divertidos y máximas de las que me sentí tan orgullosa que parecía que era unos centímetros más alta. Como lo de que no somos el segundo plato de nadie, ni el postre, ni el gintonic de después. O lo de que no busco la media naranja porque ya soy una naranja entera.

Al llegar a casa me puse música a todo trapo. Y, mientras podía haber elegido una voz tranquila que me recordara lo bella que es la vida, me decanté por algo más cañero para reproducir una versión femenina de Risky Business en los pasillos de casa mientras me arreglaba para salir, pues había quedado con M de cañas.

Al día siguiente, el sábado, en nuestro paseo artístico, N nos decía que “el arte no nos habla sólo de belleza, sino también de nosotros mismos”. Poco después, parados frente al exterior de la capilla de los Vélez, sonaba de fondo la voz de la murciana AlondraBentley. 

¿Mi consejo final ante cualquier atisbo de bajón? Rodéate de arte, belleza y date mimos. Al fin y al cabo, nadie te va a querer más que tú, nadie te aguanta mejor que tú, y sin ti… no eres nada.