No sé por qué motivo pensaba que hoy, 27 nov, se cumplía
un año de este mi tontiblog. Pero no. Llevo dos días de retraso, ups!
Así pues, reescribo el post:Hace un año y dos días, un domingo, decidí hacer públicas mis historias, mis rollos, paridas e idas de pelota. 209 posts, sin contar este.
Empecé con dos entradas, una emulando a la Bradshaw, y otra, con la canción que subtitula al blog. El primer comment no llegó hasta el tercer post, de alguien que luego escribió con otro nombre y que ahora me comenta en persona. En el cuarto post hablaba de que no hacía deporte, en el quinto ya empecé a meterme con Yecla, y en el sexto empecé a hablar de comida... También hablé mucho de tíos, de las relaciones humanas, la falta de cortejo y mis ganas de amor y fue precisamente un post sobre este tema el que se llevó el
record de comentarios.
Han cambiado muchas cosas en este año. Cambios mayoritariamente buenos, pero de los que ya haré balance en su momento. Mientras tanto, otras cosas se mantienen intactas, como mi pasión por la música, por tener mi propia casa, mi apetito, mis chapas y las ganas de contaros las pequeñas chorradicas del día a día.
Otra cosa que no cambia, y que también cumple un año por estas fechas es algo de lo que yo he hablado mucho en este blog: el 609. Mencionado por primera vez el 17 de diciembre y "probado" por primera vez el 21, ¿quién me iba a decir que iba a ser el escenario de tantas y tantas historias?
Ayer se celebró el aniversario con una exclusiva y exquisita fiesta a la que yo fui invitada, y es que no podía faltar! Hubo risas, viejunos, caras conocidas y las canciones peretas de siempre. También hubo tortillas de patatas, saladitos, sushi y ferrero rocher.
Fue extraño, porque para una vez que era la 1 de la madrugada de verdad, yo esta vez tenía la impresión de que fueran las 7 de la tarde.
Mañana habrá más 609, aunque sea un ratico. Es que es viernes, pijo.
Este post se lo dedico a todos mis lectores y comentaristas, porque vosotros dais magia a este blog. Porque sois todos grandes amigos, os conozca en persona o no, y porque es divertido, cuando los desconocidos os presentáis, que hablemos de nuestras cosas como si fuéramos amigos de toda la vida.